Así lo aseguró el gobernador, Alberto Rodríguez Saá, después de anunciar las medidas económicas que incluyeron aumentos salariales para la administración pública y para las y los beneficiarios de Inclusión Social. Con estos nuevos incrementos, ninguna persona que trabaje para el Estado, estará bajo la línea de la pobreza. El primer mandatario también remarcó que se continuará monitoreando en los próximos meses.
En el Salón Blanco de Terrazas del Portezuelo, el gobernador, Alberto Rodríguez Saá, anunció un nuevo aumento salarial para las y los empleados públicos y beneficiarias y beneficiarios de Inclusión Social. La medida se tomó debido al contexto macroeconómico nacional y la inflación que afecta los bolsillos de las y los trabajadores.
“Estamos frente a una crisis nacional distinta, que obviamente no la generamos nosotros, y que tampoco tenemos que resolver. Pero, tenemos que ver cómo repercute en San Luis y tomar medidas. Ése es un problema, el otro problema es la mini crisis que se produjo con Inclusión Social. A estas dos cosas me voy a referir”, inició el primer mandatario puntano.
Rodríguez Saá refirió a los últimos datos sobre los índices inflacionarios brindados por el Instituto de Estadística y Censos (INDEC); que establece una inflación del 12,4%, la más alta de los últimos años. “Nosotros venimos corriendo frente a la inflación desde la época del presidente Macri, hemos ido siempre adelante, incluso, en algún momento hemos llegado a estar entre los 5 mejores o los 10 mejores sueldos de la Argentina” recordó.
Posteriormente, mencionó los números de la canasta familiar básica que incluye alquiler, transporte, escuela, salud y esparcimiento. Se necesitan $284.687, para no estar por debajo de la línea de pobreza, aunque el gobernador recalcó la diferencia entre una familia que vive en Buenos Aires y una de San Luis, ya que los gastos no son iguales. “La mayoría de la gente en San Luis no alquila porque los planes de viviendas nuestros han sido extraordinarios. Por supuesto hay gente que necesita vivienda y estamos trabajando en eso”, mencionó. En cuanto a la educación y salud destacó que en la provincia ambas son mayormente públicas.
Sin embargo, continuó: “Sabemos que la inflación es una preocupación, la voracidad, la velocidad con la que avanza. Y en este marco, vamos a tomar medidas”.
En agosto, el Gobierno provincial brindó un aumento del 10 %. Sin embargo, se remarcó que se realizaría un monitoreo de la situación económica. “La cláusula gatillo está abierta, estamos siguiendo y monitoreando a pleno. Por ello, determinamos un incremento general salarial para este mes de septiembre destinado al personal de la administración pública de un 30 %. Abarca al personal de la administración, docentes, personal de la salud, quedando exceptuados los funcionarios del Poder Ejecutivo provincial”, anunció el gobernador y los aplausos no se hicieron esperar.
Siguió: “Hace horas se dio a conocer la canasta básica total que elabora el INDEC, la mínima es de $284.687 para un hogar. Por este motivo se va establecer un piso salarial: nadie puede ganar menos de $300.000 en la administración pública provincial para este mes de septiembre”.
En referencia a este incremento, se establecerá que entre cada categoría habrá una diferencia no menor de $30.000, es decir el 10% del piso salarial de $300.000.
El Gobierno provincial continuará monitoreando los meses de octubre y noviembre para evaluar la situación inflacionaria nacional.
