Las tarjetas de crédito internacionales suspenderán todas las transacciones fuera de Rusia y aquellas emitidas por instituciones financieras fuera del país ya no funcionarán dentro del territorio ruso.
Las tarjetas de crédito internacionales Visa y Mastercard anunciaron el sábado la decisión de suspender sus actividades en Rusia, en el marco de las sanciones contra ese país por la invasión a Ucrania.
“Con vigencia inmediata, Visa trabajará con sus clientes y socios dentro de Rusia para suspender todas las transacciones de Visa en los próximos días”, dice el comunicado de esa empresa internacional, que reproduce la agencia de noticias rusa Sputnik.
Según la nota, todas las transacciones iniciadas con tarjetas Visa emitidas en Rusia ya no funcionarán fuera del país y las tarjetas Visa emitidas por instituciones financieras fuera de Rusia ya no funcionarán dentro del territorio ruso.
“Esta guerra y la actual amenaza para la paz y la estabilidad exigen que respondamos de acuerdo con nuestros valores”, señaló el director general de Visa Alfred Kelly.
En la misma línea, Mastercad también emitió un comunicado en el que dice: “Decidimos suspender nuestros servicios de red en Rusia”. Al igual que su competidora, la empresa también señaló que las tarjetas emitidas por bancos rusos ya no serán compatibles con la red Mastercard, mientras las que fueron emitidas fuera de Rusia no funcionarán en el territorio ruso.
El texto agrega que las actividades se reanudarán en Rusia cuando “sea apropiado”, si no hay restricciones legales.
Según el Sistema Nacional de Tarjetas de Pago de Rusia, las tarjetas de los sistemas de pago internacionales emitidas por bancos rusos seguirán funcionando en Rusia, incluso si están desconectadas de Visa o Mastercard.
El presidente ruso, Vladímir Putin, anunció el 24 de febrero el lanzamiento de una “operación militar especial” en Ucrania alegando que las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, necesitan ayuda frente al “genocidio” por parte de Kiev.
Uno de los objetivos fundamentales de esa operación, según Putin, es “la desmilitarización y la desnazificación” de Ucrania.
El Ministerio de Defensa ruso afirma que los ataques militares no están dirigidos contra instalaciones civiles, sino que buscan inutilizar la infraestructura bélica.
Pero numerosos países condenaron la actuación de Rusia en Ucrania y activaron varias baterías de sanciones individuales y sectoriales que buscan infligirle a la economía rusa el mayor daño posible.
Fuente: Télam