La decisión fue tomada pese al decreto que había cerrado las contrataciones en julio del año pasado.
En el último año, el Gobierno pasó a planta permanente a 15.500 empleados estatales, pese al decreto que había cerrado las contrataciones en julio del 2022.
Este pase a planta permanente, en el que hay varios militantes del kirchnerismo, se da en un contexto que tiene al Gobierno con posibilidades reales de perder las elecciones presidenciales.
Las excusas buscadas por el Gobierno para efectivizar estos puestos son nuevos organismos.
La prohibición para las contrataciones la había decidido Silvina Batakis, quien estuvo al frente del Ministerio de Economía antes que Massa, y la medida iba a durar desde julio de 2022 hasta diciembre de 2023. Incluso apareció en el Boletín Oficial 426/2022 y tenía como objetivo generar una reducción en el gasto público, aunque habían excepciones razonables como la de suplir puestos esenciales.
Irónicamente, el caso de Batakis fue la primera “excepción”, ya que tras su corto paso por el Ministerio de Economía, Alberto Fernández decidió ponerla como directora del Banco Nación.
Ya con la llegada de Massa al Palacio de Hacienda, la medida de Batakis pareció quedar totalmente de lado y comenzaron a efectivizarse puestos como si nada. Un ejemplo de ello fue lo que ocurrió a principios de noviembre de 2022, cuando a través de la decisión administrativa 1086/2022, se “autorizaba el pase a planta permanente de 11.172 empleados públicos”.
NA